El 12 de julio pasado, la Corte Permanente de Arbitraje de La Haya concluyó con su sentencia que China no tiene sus derechos históricos en muchas de las áreas del Mar de China Meridional. Este fallo no es ni será aceptado por el referido país, ya que perjudica gravemente los derechos que Taiwán posee sobre ese sector y sus aguas circundantes.

El Gobierno de la República de China (Taiwán) reiteradamente ha proclamado que, las islas, rocas, arrecifes y aguas del Mar de China Meridional, son parte integral de su territorio en base a hechos históricos y, por sobre todo, documentaciones.

Según el Sr. Diego Wen, Cónsul General de la República de China (Taiwán) en Ciudad del Este, la decisión de la Corte, por la falta de base legal, no es ni será nunca vinculante con la República de China (Taiwán) por diversas razones. “En el texto de este fallo, se refirió a la República de China como Autoridad de China Taiwán, lo cual es una designación impropia que menosprecia el status quo de nuestro país como un estado soberano” refirió el diplomático.

El Cónsul también dijo que “La Isla Taiping (Itu Aba), originalmente no fue incluida en la demanda de Filipinas contra China. Sin embargo, la decisión del fallo se expandió en su autoridad, declarando que la mencionada isla, es gobernada por la República de China junto a otras islas pertenecientes al grupo de las Nansha (Spratly) y ocupadas por Vietnam, Filipinas y Malasia, son consideradas “rocas” por lo que no cuentan con una zona económica exclusiva.”. Diego Wen agregó que “La República de China no fue invitada a participar en el procedimiento y tampoco fue consultada antes de dictar la sentencia”.

Después del fallo no se solucionó el conflicto, al contrario, se agravó. Por consiguiente, el Gobierno de la República de China (Taiwán) reitera su defensa a sus derechos sobre el mar y a sus derechos internacionales, así como manifiesta su deseo de buscar soluciones pacíficas a través de negociaciones multilaterales.